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De die in diem

¿Réquiem por la tecnocracia?

El diccionario de la lengua española define tecnócrata como una persona especializada en alguna materia de economía, administración, etcétera, que ejerce su cargo público con tendencia a hallar soluciones eficaces por encima de otras consideraciones ideológicas o políticas. El término no parece tener una connotación negativa como la tenía antes, pero la otra opción; dejarse gobernar por políticos que enaltecen la nobleza de sus pretensiones aunque sean irrealizables, parece ser una peor opción. Así lo describe Robert P. Crease, profesor de filosofía de Stony Brook University en Nueva York, en una opinión que aparece en The Japan Times titulada “A requiem for technocracy”. En su opinión, los científicos están lejos de ser más virtuosos que cualquier otra persona y su trabajo es vulnerable al error o a ser mal utilizado por otros. Y la ciencia también está lejos de ser perfecta, pero batalla por institucionalizar el proceso observación, experimentación y revisión independiente de los resultados que a la larga provee mejores resultados que la intuición política o las (im)posturas políticas. Tal es el caso del aborto. Según el profesor Crease, el debate que precede una decisión colectiva sobre el aborto reside en los valores, no se establece un objetivo en común y la información científica sobre el tema resulta irrelevante. El problema radica en que para los políticos las opiniones científicas son sólo una opinión más. La falsa ciencia (seudociencia) que antes era del dominio de los charlatanes, ahora lo es de los políticos. El profesor en filosofía explica que el día de hoy a los políticos tanto de izquierda como de derecha les redunda más actuar en contra de la evidencia científica que apoyarla. De esta manera los políticos presentan una imagen anti élite, populista, como el común de los mortales aunque sean ignorantes. Por alguna razón me recordó la reciente formación de un órgano en el Senado de la República denominado Comisión Ordinaria de la Familia y Desarrollo Humano, mejor conocida como la “Comisión anti aborto y anti familia homosexual” Hay una petición en change.org a favor de su disolución argumentando que las familias no son “moda” ni “vehículo” reproductivo. Las familias monoparentales y las mujeres también tienen derechos. La Comisión es presidida por el Senador José María Martínez Martínez, del PAN. Ese ha sido siempre el talón de Aquiles de los comunitaristas, no cesan en su intento autoritario por imponer las pautas que ellos consideran adecuadas o en aras de un supuesto bien común. Si bien el profesor Crease se alegra de no vivir en una tecnocracia dirigida por expertos que deciden los objetivos sociales por encima de los objetivos que establece la sociedad, comienza a temer a los políticos que enaltecen la nobleza de sus ideales. “With no route from here to there, we are guaranteed to get lost.”

National History Bee

Por cuarto año consecutivo se lleva a cabo el National History Bee en la ciudad de Atlanta, Georgia. Es impresionante la cantidad de familias que se desplazan desde distintas partes de los Estados Unidos para apoyar a sus hijos. Eso sólo denota la preocupación que tienen por la educación. Era la primera vez que mi hijo participaba. Su maestra lo inscribió en la competencia y sorprendentemente se ganó su lugar en las rondas regionales. Los niños que participan en la final nacional conocen las reglas de antemano, para mi todo era nuevo. El moderador hace una pregunta, los chicos tienen un botón y lo presionan para contestar. Pueden interrumpir al moderador para contestar; pero si lo hacen incorrectamente, les cuenta. A la cuarta vez, están descalificados. Los niños pueden protestar cuando crean que una respuesta es correcta y haya sido calificada de incorrecta , pero no vi a ningún niño haciéndolo. La experiencia confirmó el presentimiento de que los estadounidenses están viéndose el ombligo. Los niños son capaces de contestar preguntas sobre los más ínfimos detalles de la vida y obra de las figuras históricas nacionales, pero no saben quién fue Pinochet o qué es la E.T.A. Mi hijo no contestó las preguntas sobre México, por ejemplo; la de la batalla del 5 de mayo o la del General John J. Pershing quien fuera enviado a México en la expedición punitiva para capturar a Pancho Villa y, en su caso, enjuiciarlo por la invasión a Columbus. Pershing no lo encontró por ningún lado. Para ser justo, yo tampoco hubiera podido contestar muchas de las preguntas que él contestó correctamente. Si su papá hubiera participado, sólo lograría cinco o seis aciertos de treinta preguntas. Había niños que al lograr 8 aciertos se levantaban de su lugar porque ya habían alcanzado la meta. El público aplaudía respetuosamente como si se tratara de un match point en un juego de tenis. Como se iban alternando las rondas de participación, a mi hijo le tocaba descansar un ronda. Decidimos escurrirnos para escuchar las preguntas en la ronda que descansaba. El moderador preguntó sobre un tratado de anatomía y mi hijo rápidamente me dijo al oído la respuesta: Gray´s Anatomy. Estuve a punto de reprimirlo diciéndole que no fuera ignorante, que eso era un programa de televisión. Ante la falta de respuesta de los concursantes el moderador dijo la respuesta; mi hijo estaba en lo correcto y el ignorante fue el papá que se la pasa viendo televisión. Con tristeza pienso que en México no se podría llevar a cabo una competencia similar. Nuestra historia es más fantasiosa que verídica, o así lo es la historia oficial; está llena de lugares comunes. Que si el padre de la patria es Hidalgo, cuando debería ser Morelos. Que si el inexistente Pípila incendió la puerta de la alhóndiga, cuando en realidad, como cuenta Fray Servando, Hidalgo no quería atacar la alhóndiga porque estaba su amigo adentro. Que los niños héroes salvaron la bandera, cuando fueron acribillados y la bandera de las barras y las estrellas ondeó durante nueve meses en el zócalo de la ciudad. Los niños podrían protestar válidamente todas las respuestas.

Onírico

El diccionario de la lengua española define onírico como un adjetivo que describe lo perteneciente o relativo a los sueños. El asunto viene a colación porque en clase leíamos el capítulo III de El nacimiento de la tragedia en el que Nietzsche dice: El griego conoció y sintió los horrores y espantos de la existencia: para poder vivir tuvo que colocar delante de ellos la resplandeciente criatura onírica de los Olímpicos. Aquella enorme desconfianza frente a los poderes titánicos de la naturaleza, aquella Moira que reinaba despiadada sobre todos los conocimientos, aquel buitre del gran amigo de los hombres, Prometeo, aquel destino horroroso del sabio Edipo, aquella maldición de la estirpe de los Atridas que compele a Orestes a asesinar a su madre, en suma, toda aquella filosofía del dios de los bosques, junto con sus ejemplificaciones míticas, por la que perecieron los melancólicos etruscos, -fue superada constantemente, una y otra vez, por los griegos, o, en todo caso encubierta y sustraída a la mirada, mediante aquel mundo intermedio artístico de los Olímpicos.

Otro artículo sobre literatura bítica

En la obra Crisis y reconstrucción de la filosofía, Mario Bunge se pronuncia a favor de las revistas científicas que son sometidas al proceso de revisión por pares por encima de lo que se puede encontrar en internet, donde no es fácil distinguir lo verdadero de lo falso. Sin embargo, el modelo de la revisión por pares entró en crisis cuando prestigiosas revistas científicas aprobaron textos generados por programas de cómputo. Este artículo del diario The Guardian explica cómo tres egresados del MIT crearon un programa de cómputo para escribir un galimatías incomprensible, luego lo presentaron como un trabajo académico y éste fue aprobado para su presentación en un una conferencia. Los autores hicieron público el código de su programa SCIgen para que cualquiera pudiera recrear la experiencia. La revista Nature reportó que el científico francés Cyril Labbé de la Universidad Joseph Fourier en Grenoble sometió varios de estos supuestos trabajos académicos al proceso de revisión por pares y más de 30 fueron aceptados para ser presentados en una conferencia. Dieciséis fueron publicados por Springer, en Alemania, y más de 100, por el Instituto de Ingenieros Eléctricos y Electrónicos (IEEE) en los Estados Unidos. Mario Bunge opina que la computadora es incapaz de evaluar proyectos de investigación, pero tal parece que el hombre tampoco es capaz de hacerlo. Mario Bunge argumenta que para una computadora lo mismo da un sentido de una oración que otra siempre y cuando se respete la sintaxis.

Alejandro Chao Barona (In memoriam)

Una de las primeras materias que cursé en el CIDHEM fue “Análisis del Proceso Electoral en Morelos” impartida por el doctor Alejandro Chao Barona. Era un profesor exigente, un poco gruñón, pero su estilo obligaba a mejorar la calidad de los trabajos. Tristemente nos enteramos de que fue asesinado junto con su esposa en su domicilio. Los reportes periodísticos hablan de un robo a casa-habitación, y tal vez hubiera corrido la misma suerte que el doctor Chao si cuando robaron mi casa hubiera encontrado a los ladrones in fraganti. Lo único democrático en Morelos es la inseguridad, de ella nadie se salva. El doctor Chao Barona era psicólogo por la máxima casa de estudios (UNAM 1969), tenía una especialidad en psicoanálisis en el Instituto de Psicoanálisis de Grupo (1972), maestría y doctorado en filosofía política, con mención honorífica, en el Centro de Investigaciones y Docencia en Humanidades del estado de Morelos (CIDHEM 1998 y 2000). La Coordinadora Morelense de Movimientos Ciudadanos ha reclamado insistentemente la participación de fuerzas federales; ya sea la policía federal, el ejército o la armada, en las tareas de vigilancia y mantenimiento del orden en el Estado. Hoy constatamos el rotundo fracaso de la estrategia de seguridad del gobierno del Estado y de su malograda propuesta del mando único. El gobernador del Estado se mostró contrariado por la muerte del que dijo era su “amigo”, pero si en lugar de disponer de los recursos del Estado para sí y para su familia (tiene más de 100 elementos para su seguridad personal) los hubiera destinado a la seguridad de los ciudadanos, probablemente el día de hoy no estaríamos de luto por la muerte de un docente ejemplar. Con esos amigos para qué quieren enemigos.

Coatlicue

En la obra Vida de Fray Servando el autor, Christopher Domínguez Michael, narra como el 13 de agosto de 1790 trabajadores que remodelaban la plaza de armas (el Zócalo) descubrieron la Coatlicue. En diciembre de ese mismo año encontraron la Piedra del Sol, mejor conocida como el calendario azteca. El autor recurre a Eduardo Matos Moctezuma para quien ambas piedras representan “la ambivalencia novohispana hacia el pasado indígena.”

Ni tecnofobia, ni tecnofilia.

En un video del programa de televisión argentino llamado “AguaFiestas” y que puede ser visto en YouTube, el entrevistador Marcelo Gioffré pregunta a Mario Bunge sobre la diferencia entre ciencia y técnica. Mario Bunge contesta que la actitud de ambas es diferente; el científico estudia la realidad y el técnico pretende cambiarla, ya sea para mejorar o para empeorar. Sus problemas también son distintos; el científico va de las causas a los efectos, el técnico de los efectos a las causas. ¿Cómo hago para transmitir una señal electromagnética de aquí a Tucumán? Esto me llevó a la reflexión sobre si el derecho es una ciencia o una técnica. Porque como ciencia que busca la verdad, pues tiene una verdad muy endeble. Si la verdad jurídica es autoritaria, como se explicó en esta entrada al blog, no puede ser ciencia. La verdad como correspondencia es muy pobre. Y el criterio de verdad planteado por Ferrajoli requiere de la univocidad semántica. En cambio, el derecho como técnica es muy parecido a lo propuesto por Bunge. ¿Cómo hago para recurrir un acto de autoridad? Mario Bunge aboga porque no se controle a la ciencia, pero a la técnica sí; ya que puede ser peligrosa. Sobre el debate actual del control en la red internet, Bunge tendría una postura similar a la que tiene sobre la técnica. En su obra Crisis y reconstrucción de la filosofía habla de los retos que la informática plantea al humanismo. Bunge distingue entre humanismo secular y religioso. Mientras que el humanismo religioso apela a lo sobrenatural, el secular mantiene la tesis cosmológica: “todo lo que existe o es natural o es hecho por el hombre”. Ello no quiere decir que uno sea mejor que el otro, son distintos.

Morir de amor

Cuando leí Cien años de soledad era un adolescente calenturiento que descubrió en García Márquez un nuevo tipo de pornografía. En El amor en los tiempos del cólera por lo menos Florentino Ariza se acostaba con cuanta mujer tuviera oportunidad en lo que esperaba, como zopilote, a que muriera el esposo de su amada. Y así, hasta que en Memoria de mis putas tristes el viejito añoraba con desvirgar a una doncella y cuando finalmente la madama le consigue una puta virgen, se pasa el rato conversando con ella. Ya no era el mismo García Márquez. Me imagino que cada una de sus obras tuvo su momento en la vida del autor que no necesariamente coincide con el interés del lector. Tal vez, si ahora releo El general en su laberinto o Noticia de un secuestro, los encontraré más interesantes. No sucedió lo mismo con Doce cuentos peregrinos o con La hojarasca, ésta tuve que leerla, no sin un gran gusto, para la clase de Eliana Albala en el CIDHEM. Sin haber leído toda la obra de García Marquez ni declararme su fan número uno, su muerte me afectó como te puede afectar la muerte de un conocido. Y aunque García Marquez no morirá del todo, la muerte de un inmortal te recuerda tu propia mortalidad. Omnia mors aequat En la obra La vida eterna, Fernando Savater cita a Freud para quien:

El discurso de la alteridad

[ ] Ayer, con motivo de las protestas en Amilcingo en contra del gaseoducto fueron detenidas cinco personas. En un principio, Jorge Messeguer, secretario de gobierno, dijo que se trataba de poblanos que habían incitado a la violencia. Como si los poblanos fueran extraños al cuerpo homogéneo de morelenses. Yo no podría distinguir entre un amilcinga y un poblano. El Secretario de Gobierno discrimina sin contemplación, pues aún sin conocer los hechos ya sentenciaba que eran poblanos los otros, los “revoltosos”. ¿Pensará declararle la guerra al Estado de Puebla? En el texto “Formas de alteridad: un reto epistemológico y político”, Donovan Adrián Hernández Castellanos cita a Anabel Cucagna, para quien “la alteridad funciona como una operación de distinción entre semejanzas y diferencias que designa y ubica a ‘otros’ desde la perspectiva de un ‘yo’ o un ‘nosotros’. Por medio de una disyunción, la alteridad establece un vínculo entre identidades y llega a naturalizar la relación entre ellas” Donovan Hernández también cita a Bernard Bruneteau quien ha descrito el fenómeno:

Globalismo, globalidad y globalización

En la anterior entrada al blog se comentó sobre la relación entre educación y conocimiento. Un artículo publicado por The Economist el 18 de enero de 2014 y titulado “Coming to an office near you” comienza con la siguiente frase: INNOVATION, the elixir of progress, has always cost people their jobs (INNOVACIÓN, el elixir de progreso, siempre le ha costado a la gente sus puestos de trabajo). El artículo describe cómo después de 30 años de revolución digital se han desplazado, por no decir destruido, miles de trabajos que fueron el sustento de la clase media en el siglo XX. Aquí la innovación tiene un supuesto; que aunque se destruyen algunos puestos de trabajo, se crean otros nuevos y mejores, con una sociedad más productiva, sus ricos habitantes demandan más y mejores bienes y servicios. Bueno, pues la preocupación es; ¿y si no? Y aclaro que es una preocupación y no un problema, pues como explica Fernando Savater en su obra La vida eterna; si fuera un problema, implicaría que éste tiene solución. Puede ser que no la tenga. En la obra ¿Qué es la globalización?, Ulrick Beck explica que la disociación del lugar de la producción, del lugar de la inversión, del lugar de declaración fiscal o del lugar de residencia, ha causado que las empresas puedan producir en un país, pagar impuestos en otro y exigir gastos estatales en forma de infraestructura en un tercer país. Y el autor se plantea una interrogante; ¿cómo va a financiar el Estado la infraestructura que reclaman si se torpedea la financiación pública? Por lo que plantea que es necesario “formular en nuevos términos teóricos y políticos la cuestión trascendental de la justicia social en la era de la globalización.” Esta formulación de nuevos términos lo lleva a describir una enfermedad del lenguaje o decadencia del cerebro, ya que los conceptos están vacíos, ya no aprehenden, iluminan o seducen.