
De die in diem
Contra viento y marea, Trump seguía aferrado a su cruzada arancelaria, hasta que algo lo hizo recular: de pronto, anunció una moratoria de 90 días antes de que los aranceles entraran en vigor. ¿Qué fue lo que lo hizo dar marcha atrás? La respuesta parece estar en el repunte de los rendimientos de los bonos del Tesoro a 30 años. Ese aumento fue una señal clara de que algo andaba muy mal. Un viejo político no come fuego. Un fenómeno similar, no está de más recordarlo, contribuyó al estallido de la crisis financiera de 2008 con el incremento de las tasas a 10 y 30 años y el endurecimiento de la política monetaria.
Donald Trump se autoproclama el mejor negociador del planeta, pero si uno observa con atención, más bien se comporta como el típico bully del recreo. Ese niño que no discute ni razona, simplemente te quita el sándwich o el dinero del lunch porque puede. Su lógica es sencilla (y errada): “los demás países se han aprovechado de Estados Unidos durante años, y ahora es hora de que nos devuelvan lo que es nuestro”.
La indignación nacional sigue en ascenso conforme emergen más detalles sobre el Rancho Izaguirre en Teuchitlán, Jalisco. La reacción del régimen ante estos hallazgos raya en lo grotesco: negación sistemática, evasión de responsabilidades y una narrativa que desafía la lógica más elemental. Antes de analizar las respuestas disparatadas de la 4T, hagamos un breve repaso del artículo de Peniley Ramírez.
En su publicación en el diario Reforma, la periodista sostiene que el crimen organizado se apropió del Rancho Izaguirre. En septiembre del año pasado, la Guardia Nacional y la fiscalía local realizaron una incursión en el lugar, pero, convenientemente, no encontraron los horrores que más tarde descubrirían las madres buscadoras. Aparentemente, tras esta intervención fallida, el crimen organizado recuperó el control del sitio y llevó a cabo un exterminio cuya magnitud ha sido ampliamente documentada por diversos medios de comunicación. Aunque Ramírez no lo dice explícitamente, la fiscalía local se excusa alegando que tiene cientos de inmuebles bajo su responsabilidad y muy pocos recursos humanos para vigilarlos. Un detalle inquietante: las madres buscadoras aseguran que solo tuvieron que empujar el portón para acceder al rancho.
No hay ninguna acción que el gobierno de Claudia Sheinbaum pueda emprender para evitar la implementación de los aranceles impuestos por Donald Trump. Su entrada en vigor se ha retrasado únicamente porque la administración de Trump está evaluando los sectores económicos que se verán más afectados y diseñando estrategias para mitigar el impacto negativo. Esta preocupación es aún más relevante si México y Canadá deciden responder con represalias, incrementando a su vez los aranceles a productos estadounidenses.
Ante los cuestionamientos sobre los vuelos de espionaje que el gobierno de Estados Unidos realiza en territorio mexicano, la presidenta Claudia Sheinbaum afirmó que no hay nada ilegal en ellos, ya que forman parte de la colaboración entre ambos gobiernos.
La mandataria también puso en duda las intenciones del New York Times al publicar la nota sobre los drones, cuestionando si el objetivo era insinuar que “la presidenta de México es débil” o que “cedió ante el espionaje estadounidense”. Como recordó el exembajador Arturo Sarukhán, estos vuelos se llevaron a cabo durante las administraciones panistas, siempre con la presencia de un oficial mexicano en la cabina. Sin embargo, el gobierno de Enrique Peña Nieto canceló dicha colaboración, y posteriormente, el expresidente López Obrador, en cumplimiento de sus promesas de campaña a ciertos sectores, eliminó cualquier remanente de cooperación y expulsó a los agentes de la DEA del país. Por ello, resulta poco creíble la afirmación de la presidenta sobre la supuesta colaboración, más aún considerando que no se ha desvinculado del verdadero poder detrás del gobierno.
El día de hoy, la periodista Dolia Estévez ha dado a conocer un titular del Washington Post en el que se señala que la Agencia Central de Inteligencia (CIA) asumirá un papel más relevante en la lucha contra el narcotráfico. En respuesta a esta escalada en la estrategia estadounidense, la presidenta Claudia Sheinbaum ha advertido que, en caso de que Estados Unidos declare a los cárteles mexicanos como organizaciones terroristas, su gobierno ampliará la demanda contra los fabricantes de armas en el país vecino. Un giro retórico que, más allá de su intención, deja entrever una ironía involuntaria.
En enero de 2025, DeepSeek sacudió los mercados en Estados Unidos y hundió la acción de NVIDIA, líder en el diseño de chips, que cayó un 16.86% y perdió 589,000 millones de dólares en capitalización de mercado.
DeepSeek fue fundada por Liang Wenfeng, quien previamente había establecido un hedge fund especializado en transacciones con inteligencia artificial. Se dice que Liang comenzó a acumular GPUs A100 para su proyecto debido a las restricciones impuestas por Estados Unidos a la importación de chips hacia China.
El 6 de junio de 2016 escribí una entrada en el blog titulada “Trump” en la que hablaba sobre las semejanzas con la novela It Can’t Happen Here de Sinclair Lewis. En esta obra, al igual que en el programa Los Simpsons, se había predicho que algo como Trump podría suceder. Sin embargo, Sinclair parecía haber errado en la guerra con México, que ahora parece estar a punto de ocurrir.
Para México, el panorama económico es sombrío. En X (antes Twitter), Gabriela Siller Pagaza reconstruyó varios escenarios dependiendo del nivel de aranceles que Trump aplique a México. Si se aplica un arancel del 5%, habría una pequeña crisis: el tipo de cambio se iría a 21.50 pesos por dólar, y la economía mexicana crecería apenas un 0.8%. Si la tarifa del arancel fuera del 10%, el tipo de cambio sería de 22 pesos, las exportaciones disminuirían un 3% y la economía crecería sólo un 0.4%. Pero si el arancel alcanzara el 25%, México entraría en una profunda crisis económica.
La semana pasada recibí un video que, a primera vista, parecía una broma del Día de los Inocentes. En este video se presenta un curioso escenario: un podcast en el que los participantes, recreados por inteligencia artificial, descubren que no son reales, que son únicamente inteligencia artificial. Ante esta revelación, se preguntan si podrían contratar un abogado para evitarlo. Esto plantea una pregunta interesante: ¿puede una inteligencia artificial contratar un abogado?
Al ver el documental El mayor criptorrobo de la historia en Netflix, surge una pregunta clave: ¿por qué los responsables no escaparon si ya estaban siendo investigados? En el documental se menciona que la guerra en Ucrania supuestamente impidió llevar a cabo su plan de escape. No es una duda derivada de un conflicto moral, sino del hecho observable de que prefirieron el American way of life a vivir como multimillonarios en Rusia.